Abadía de Westminster: Entrada
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Visita uno de los edificios religiosos más famosos del Reino Unido
13 opciones • a partir de 17,60 US$
Combina Abadía de Westminster con otros favoritos de Londres. Algunas cosas es mejor disfrutarlas juntas.
Puedes hacer el recorrido entero de la abadía de Westminster en menos de una hora si no te paras y vas a un ritmo relajado. Sin embargo, a mucha gente le gusta pasar un día entero (o más), porque está llena de cosas para ver. Lleva tus entradas para abadía de Westminster y prepárate para ir a tu ritmo.
Para evitar las colas, intenta utilizar tus entradas para la Abadía de Westminster temprano, durante las horas de menor afluencia. Si vas a visitarla en julio o agosto, llega a la hora de apertura, o unos 20 minutos antes.
La hora del almuerzo suele ser la más concurrida del día (justo después del Cambio de Guardia en el Palacio de Buckingham).
La Abadía de Westminster cierra más tarde de lo habitual los miércoles, en 18:00. A esta hora sólo se permite la entrada a visitantes individuales. Intenta llegar a 16:00 y tendrás tiempo de sobra para explorarla tranquilamente.
El culto tiene lugar todos los días en la Abadía. Suele haber cuatro servicios diarios en 07:30, 08:00, 12:30 y 17:00. Los domingos hay seis servicios en 08:00, 10:00, 11:15, 15:00, 17:45, y 18:30.
Hay varios tipos de entradas para la Abadía de Westminster disponibles, y todas ellas te permitirán pasar un día memorable en este legendario monumento.
No se permite entrar con equipaje, mochilas o maletas grandes, pero hay lugares para guardar las bolsas más grandes si lo necesitas.
Puedes traer una cámara fotográfica, pero recuerda que no está permitido hacer fotografías dentro de la abadía de Westminster. Hay personal de seguridad en todas las salas y son muy rápidos a la hora de detectar a los visitantes que hacen fotos.
La Abadía de Westminster es una gran iglesia abacial de estilo predominantemente gótico situada en la ciudad de Westminster, Londres. La abadía, de 700 años de antigüedad, recibe cada año a más de 1,5 millones de visitantes.
Es uno de los edificios religiosos más conocidos y reconocibles del Reino Unido, así como el lugar tradicional de coronación y el lugar de enterramiento de los monarcas británicos.