Josefov, el histórico barrio judío de Praga, representa un lugar clave del patrimonio judío en el mundo y es un recordatorio de las dificultades que ha sufrido la población judía de la ciudad en los últimos siglos. Hoy en día, es un barrio bullicioso lleno de bares y restaurantes de moda, pero el legado de su comunidad judía sigue vivo a través de los muchos puntos de referencia culturales que aún alberga, muchos de los cuales forman parte del Museo Judío de Praga. El antiguo cementerio judío alberga unas 12.000 tumbas que contienen los restos de personajes célebres y gente común. Sus lugares de culto son mundialmente conocidos, especialmente la sinagoga Vieja-Nueva, la sinagoga más antigua de Europa.