El Château de Fontainebleau está a solo 55 kilómetros del centro de París. Este enorme palacio dispone de más de 1500 habitaciones y consta de 130 hectáreas de jardines y parques. Es uno de los mayores palacios reales jamás construidos en Francia. Napoleón adoraba Fontainebleau, hasta el punto que supervisó él mismo las labores de restauración del palacio. Napoleón III fue otro visitante regular. Pero muchas han sido las vicisitudes por las que ha pasado el palacio; por ejemplo, su ocupación por parte de los nazis, que lo utilizaron como cuartel general durante la Segunda Guerra Mundial. En la actualidad, forma parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO.