El tren de Sóller es una línea ferroviaria histórica que se inauguró en Mallorca en 1912 para cubrir el trayecto de Palma a Sóller. Más de 100 años después de su primer viaje, el tren sigue conservando el mismo aspecto que el día de su inauguración, gracias a los continuos cuidados y trabajos artesanales que ha recibido a lo largo de los años. El tren de Sóller ya no se utiliza como medio de transporte público, y los mallorquines prefieren opciones modernas como los autobuses regulares o sus propios coches. Pero los visitantes de la isla siguen dejándose iluminar por la belleza de este tren y los paisajes que atraviesa en su camino hacia Sóller, y sigue atrayendo a cientos de miles de viajeros cada año.